A propósito del 206 aniversario de Tarija que se celebra hoy 15 de abril, el presidente Luis Arce anunció que este mes arranca la construcción de la ‘Planta procesadora de extracción de aceite vegetal y aditivos de macororó y jatropha’ que proveerá materia prima para la producción de biodiésel.
Con este proyecto, Tarija que ha sido por muchos años el pilar de la industria hidrocarburífera boliviana, será ahora también protagonista en la política de sustitución de importaciones que encara el Gobierno, para reducir los volúmenes importados de diésel y gasolina.
Arce dio a conocer la información ayer viernes durante su discurso en la sesión de honor por la efeméride departamental.
La planta estará ubicada en el municipio de Villa Montes, con una inversión de Bs 82 millones. Tendrá una capacidad de procesamiento de 200 toneladas métricas (TM) día de macororó, para la producción de 84 toneladas métricas al día de aceite crudo, el cual se destinará a la planta de biodiésel que se construye en Santa Cruz.
El mandatario mencionó que el Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (Sedem) y la Industria Boliviana de Aceites Ecológicos (IBAE) “están contratando empresas que se harán cargo de la construcción de la planta e iniciarán obras en este mes”.
Con esta nueva factoría, se beneficiará a más de 1.100 productores agrícolas en Tarija, además de generar empleos directos e indirectos, tanto en la etapa de construcción como en la de operación.
Plantas de biodiésel
Actualmente se construyen dos plantas de biodiésel en Bolivia, una ubicada en Santa Cruz y otra en El Alto, con capacidad de producción de 1.500 barriles por día cada una.
Ambos complejos se alimentarán de aceites de macororó, jathropa y otros granos que serán extraídos de plantas agrícolas como la que se construye en Tarija.
El Gobierno busca depender cada vez menos del uso de combustibles fósiles, para reducir los costos de subvención y lograr una transición energética hacia fuentes ecológicas.
