El Gobierno y sectores productivo – empresariales se reunieron en Santa Cruz y acordaron una agenda de trabajo, con el objetivo de fortalecer la lucha conjunta contra el contrabando, que ha pasado de ser una simple actividad ilícita de minoristas para transformarse en un negocio millonario de grupos criminales.
Datos de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), revelan que el contrabando creció a más de $us 3.600 millones anuales y amenaza a 2,6 millones de empleos en Bolivia.
Durante el encuentro desarrollado este lunes, el viceministro de Lucha contra el Contrabando, Pedro Vargas, expuso ante 33 representaciones de empresarios y sectores productivos los operativos e incautaciones que realizan las fuerzas anticontrabando, principalmente en las diferentes fronteras de Bolivia.
Por su parte, la Cámara Nacional de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), realizó una exposición sobre el impacto del contrabando en los sectores productivos y la urgencia de combatir estas actividades ilícitas.
Finalmente, el Gobierno y el sector privado acordaron “la definición de una agenda público – privada y compromisos de acciones conjuntas en la lucha contra el contrabando”.
