Las inundaciones que golpearon a los municipios de Cuatro Cañadas y Okinawa no ocurrieron por desborde de ríos, sino por una precaria infraestructura de drenaje que impide una correcta canalización del agua de lluvia, afirmó José Antonio Rivero, director de Cuencas del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi).
El técnico aseguró que en los municipios afectados existen canalizaciones internas que desembocan a quebradas pequeñas. Las mismas no tienen el tamaño necesario para resistir el caudal de las precipitaciones pluviales y se generan rebalses y afectaciones a cultivos y hogares.
“Se realizan canalizaciones internas en predios tanto comunitarios, como privados, y desembocan a distintos arroyos y quebradas menores, similares a donde murió el señor que tuvo el accidente con su vehículo, (…) no tienen una sección adecuada, es decir, lo profundo y lo ancho, para que resista el caudal de agua que llega de toda la zona”, explicó.
Además, indicó que los puntos de embalse están obstruidos por caminos vecinales, puentes improvisados y otras infraestructuras que no tienen un diseño hidráulico e hidrológico adecuado para hacer frente a un temporal de lluvia.
Rivero señaló que desde el Searpi se ha advertido en diferentes oportunidades sobre estos problemas y la necesidad de que los gobiernos municipales puedan mejorar la infraestructura pluvial. Dijo que ya se ha entregado una ‘ruta crítica’ a las autoridades locales con las tareas urgentes que se deben encarar, para que el agua de lluvia pueda ser correctamente canalizado hacia los ríos, así como su aprovechamiento para el riego de cultivos.
“Se hizo una ruta crítica con un detalle preliminar de dónde tendrían que desaguar las aguas para que salgan normalmente a los ríos, por ejemplo, en ciertas zonas de Cuatro Cañadas y San Julián tendrían que descargar a la Cañada Pailita, pero este lugar necesita trabajo de regularización y encauzamiento para que aguante todo el caudal que llegará”, detalló.
El Searpi también inició un estudio para realizar ‘canalizaciones maestras’ en estas zonas, pero Rivero lamentó que comunarios impidieran que el mismo finalice, ya que aparentemente no están de acuerdo con las propuestas de desagües. Sin embargo, advirtió que los desvíos de cauces que ellos realizan están propiciando que haya mayores inundaciones.
“Hay muchos cauces, drenajes superficiales que pasaban por una comunidad y ahora los comunarios lo han desviado para que rodee la comunidad, entonces ahí hay un problema porque no le dan la sección y la dirección adecuada a las aguas”, puntualizó.
