Bolivia ya conoce a su rival para el Grupo Mundial II de Copa Davis, se trata de Uruguay, al que enfrentará por segunda vez en la historia de esta competición y lo hará en condición de local, según el sorteo que se llevó adelante este jueves en las oficinas de la Federación Internacional de Tenis (ITF por sus siglas en inglés) en Londres, Inglaterra. Quedaron definidas las 24 eliminatorias (12 por el Grupo Mundial I y las otras 12 por el II) para los duelos que se disputarán a mediados de septiembre de este año.
Esta vez a Bolivia no le tocó un rival de otro continente —como sucedió en pasadas ediciones—, sino que rivalizará con una selección sudamericana. La selección nuevamente será anfitrión porque la única vez que se enfrentaron fue en tierras charrúas. Sucedió hace 18 años, en abril de 2006, cuando jugaron por la primera ronda del Grupo II de la Zona Americana.
Compitieron en la ciudad de Salto, donde los uruguayos se impusieron por un contundente 5-0. En aquella ocasión jugaron tenistas nacionales que hoy en día “colgaron” la raqueta, Mauricio Estívariz, Carlos Álvarez, José Roberto Velasco, Jorge Villanueva y el capitán (entrenador) Carlos Alvarado. Tuvieron que pasar casi 20 años para que ambas naciones vuelvan a enfrentarse. Bolivia llega a esta instancia luego de ganar por 4-0 a Tailandia en los Play-Offs del Grupo Mundial II, mientras que Uruguay derrotó en la misma fase a Moldavia (3-2).
A priori Bolivia es favorita para ganar la serie con los charrúas porque tiene tenistas mejor ubicados en el ranking ATP. Hugo Dellien es el mejor del país (112), también están su hermano menor Murkel (293), Juan Carlos Prado (606), Federico Zeballos (94 en dobles) y Boris Arias (95 en dobles). Mientras que los uruguayos que derrotaron a Moldavia fueron Franco Roncadelli (614), Ignacio Carou (863), Joaquín Aguilar (1.107), Federico Aguilar (1.681) y Ariel Behar, quien es especialista en dobles y es el mejor de su país (41 en la clasificación por parejas).
Esta serie se disputará el viernes 13 y sábado 14 de septiembre o el sábado 14 y el domingo 15 de septiembre. Bolivia, al ser anfitrión, elegirá las fechas de los encuentros y también la sede, ya que podría jugarse en cualquier departamento que desee albergar el torneo, pero que al mismo tiempo cumpla con todas las condiciones internacionales.
